Sin más nada que decir… prosigo

Sin chongos ni príncipes azules a la vista prosigo a escribir alguna que otra pelotudez para no abandonar el habito. Si alguno que mis lectores (dos o tres que no tienen que mierda mas leer) solo quieren saber si ya enganche algo, cierre este blog con confianza y lea otro mas interesante.

Hoy Largo me siguió chamullando por chat, tanto así que después de una hora me hice la pelotuda y le dije que tenia que hacer otras cosas para no seguir escuchado mas melosidades. Me dio un poquitito de lastima, al pibe le agarre cariño y no lo quiero tener como pelotudo, aunque literalmente, o no literal, o como sea, nunca le di señales de estar interesada en sus largas piernas ni en su persona. Del Peque sin noticias, y de Fercho… ya le puse nombre artístico, ahora para mi, para ustedes y para el pueblo, es el Cobayo.

Del Cobayo sin noticias, salvo que mañana a la noche va a ir a bailar a … el mismo lugar donde nuestras miradas se cruzaron aquella ves. ADVERTENCIA: Cuando yo cuente cosas el día después de una salvaje noche de alcohol, puede que algunas historias estén distorsionadas por la ingesta de sustancias nocivas, en todo caso… son como las recuerdo yo!

La cosa es que el Cobayo este va mañana a la noche a bailar, y a donde mierda piensan que voy a ir yo???? Pero claro que si! Mañana me pongo linda, una remerita que muestre un poco, me calzo taco aguja y que sea lo que Dios quiera…

Hoy por lo visto me quedo en casa, ya me compre un 20, me prepare un café, y que la suerte y semiótica me acompañen.